Tanto el robo como el hurto implican el hecho de apoderarse de un bien ajeno, pero la diferencia estriba en que en el robo hay violencia, amenaza o fuerza para conseguir ese propósito; en tal caso, el delincuente consigue superar la resistencia de su víctima.
Además, consideramos robo las acciones en que la persona emplea su fuerza para abrir, por ejemplo, la puerta de un vehículo, puesto que la fuerza no tiene que ir dirigida al individuo necesariamente.
Entonces, ¿qué diferencia hay entre robo y hurto? La diferencia es simple, en el hurto no existe ningún tipo de violencia o intimidación a la hora de querer apoderarse de un bien ajeno.
Por ejemplo, sería robo si el delincuente forzara la puerta de una casa, y hurto si el ladrón se la encontrara abierta y cometiera el delito.
Es importante que sepamos qué diferencia hay entre robo y hurto puesto que, por ejemplo, en los contratos de seguros del hogar se establece un trato diferente entre una acción y otra.
Prácticamente, todas las compañías de seguros cubren los daños causados por robo en las pólizas del seguro del hogar.
No obstante, es muy aconsejable que leamos con detenimiento las cláusulas para confirmar que esa contingencia está cubierta.
Este tipo de seguro que cubre el robo también suele responsabilizarse de los desperfectos o pérdidas económicas ocasionadas por este.
Es decir, si al efectuarse el robo se han roto puertas o ventanas, la compañía asume la reparación.
Por el contrario, es frecuente que las compañías de seguros no cubran el hurto, ya que conlleva una negligencia o descuido por parte del asegurado.
En el caso de un coche, la garantía de robo es un producto concreto que nos ofrecen las aseguradoras y suele ir asociado a otros productos, como el seguro a terceros.
El robo, incluye el hurto (sin intimidación y sin forzar la cerradura).
En definitiva, hemos de tener clara qué diferencia hay entre robo y hurto, algo esencial a la hora de contratar un seguro y saber el alcance de la cobertura.
En términos legales, el hurto se regula considerando una acción discreta, mientras que el robo es regulado para castigar actuaciones intimidatorias y violentas, ya sea sobre individuos o el espacio en que se hallan los bienes.
Es por ello que la pena del robo es superior a la del hurto.